domingo, 20 de junio de 2010

El cine y yo (Apartado TV): Las Teleseries.-


Por: Melisa Blanc.-


Ok. Creo que hay que ser francos. TODOS vemos tele. Ya, dejen de esconderse, asuman su realidad, y descubran que no es nada grave. Está en todas partes y técnicamente no sirve para muchas cosas. Es ruidosa, radioactiva y posiblemente alguna universidad ociosa de California demuestre que produce cáncer. Pero la amamos.

Cada mañana despertamos con ella (nadie se acuerda de ver el TVN en la mañana mientras daban videos musicales antes del ir al colegio?), nos dice la hora, nos cuenta sobre la vida de otras personas, y nos ofrece una amplia gama de maneras de ser idiotas. Nos permite dejar de pensar y sobretodo, tiende a entretener.

Pese a que veo más películas que programas, yo amo la tele, pero de ella qué es lo que me gusta más? Serán los comerciales de MTV? Será la franja electoral? Será cuando el lector de noticias se equivoca en leer una palabra? Será cuando están reportando y la gente que va caminando detrás del reportero se cae o se queda mirando? Será que me gusta el segmento del tiempo? No, damas y caballos, es mucho más fácil que eso: son las teleseries (Y en este punto todos hacen un silencio respetuoso).

"Son para minas" Cómo odio ese comentario! Tendré pajarito acaso?? pero en fin... hoy quiero referirme a estas joyas del cerebro humano, que comenzaron como típicos segmentos de dramatización en los que había que hacer parecer reales los conflictos.... hasta hoy.

Son las ocho y media, y durante gran parte del día he estado viendo cómo el koreano de mi teleserie busca a su padre y se enamora de la mina del tipo que no sabe que es su hermano, lo atropellan y 10 años después aparece como otra persona, porque ha perdido la memoria, cuando ella lo ve y está a punto de casarse con otro, lo deja y vuelven a estar juntos... y luego no los dejan casarse porque creen que son hermanos... sin embargo mientras tratan de averiguar eso, el antes desmemoriado empieza a quedarse ciego.... Y yo me la he sufrido TODA!

Miren, si la gente comenzó a hacerlas para mujeres, fue porque a las mujeres nos gusta esta cosa de ver cómo Luis Mario lucha por convencerse de que debe casarse con su ex novia porque sorpresivamente quedó embarazada justo en el momento en que él le dijo que la dejaría para quedarse con María Angélica, la pobre chica del mercado, que en realidad es la única heredera de la empresa hotelera para la que trabaja. En serio, seamos honestas, son maravillosas.

Pero la sociedad cambia, y a la gente le gusta verse más intelectual... entonces en lugar de teleseries, se inventaron las series.

Las hay para todos los gustos. Las más convencionales las ven en un sólo canal toda la vida (como mi abuela, que hace el mismo zapping al menos desde hace 23 años, entre el 13 a la hora de almuerzo, y TVN el resto del día).

Por otro lado están las mujeres que ven la teleserie de moda (más o menos en la etapa escolar, cuando no tienes mucho más qué hacer).

Luego viene la gente ocupada que ve las nocturnas (con temáticas que abarcan los intereses de gente ocupada durante el día... en teoría, claro, y como son más los ocupados, las teleseries nocturas son las más polémicas).

Está la gente que llora con las teleseries, que las toma en serio, que las hace parte de su vida. Esos que se pusieron de nick en msn que se había muerto Elisa.

Después aparece ese segmento que no ve teleseries... pero ve series (que partieron siendo teleseries para hombres, así como la lucha libre, pero ahora se tratan de cualquier cosa). Asuman su realidad, las series tienden a ser culebrones csi-fi... pero culebrones al fin y al cabo.

También estamos nosotros, los bicharracos, que vemos teleseries extranjeras... que nos alimentamos del youtube o el megaupload y que podemos comentarlas con muy pocas personas más. Existe la ñoñería incluso en las teleseries....

Y finalmente, no hay que dejar de admitir que la tele nos educa. Las teleseries nos enseñan un montón de cosas, que van desde los embarazos falsos, a los tumores cerebrales falsos, los resfríos falsos y los certificados de defunción falsos. Nos advierten sobre los vaivenes de la vida, sobre las traiciones y que las mujeres con sensuales desplantes o son muy malvadas, o están llevando a cabo una venganza esperada por años. Tambien aprendemos a valorar la salud, principalmente porque cualquier cosa puede dejarte ciego, y si eres muy feliz, es porque muy pronto irás al médico y te dirá que te quedan 3 días de vida.

martes, 15 de junio de 2010

Sobre maracas, cabronas y concubinas.

Por Gorgona (desaparecida en acción)

La construcción hegemónica de la femineidad ha tendido siempre ha ligar a lo femenino a una polaridad que se podría representar a través de las figuras bíblicas de la Virgen y María Magdalena (la puta), siendo el ideal de femineidad ligado a la virginidad, pureza... en fin, a una especie de áurea de asexualidad; mientras que todo lo ligado a la sexualidad femenina, sino se reduce a la reproducción, cae en el lado oscuro de la fuerza bajo el apelativo de "puta", o más bien "maraca". Al menos ha sido así en términos tradicionales.

Es así como nos encontramos en el impactante contraste de que mientras un hombre es considerado bkn, cabrón, macho, exitoso, galán, etc, cuando logra liarse a varias parejas o tener relaciones casuales; una mujer con una conducta similar es tildada de "maraca"; cuando en el fondo pareciera no existir una diferencia sustancial entre ambos comportamientos. Hasta las mismas mujeres tildan a sus congéneres de maracas cuando las ven en dichas andanzas... por qué? Bueno, básicamente por dicha construcción de la femineidad que tenemos cuya raíz podría encontrarse en la tradición judeocristiana y, con mayor énfasis, en la satanización de lo femenino durante la edad media, donde la mujer ya no sólo era virgen y madre (?) o puta, sino que también bruja. Y al igual que una bruja y una adúltera, la mujer que vive su sexualidad de manera distinta es señalada con el dedo para tildarla de maraca, mientras en el caso del hombre simplemente no es tema, es normal.

Ahora bien, tras la introducción de la píldora anticonceptiva, se vivieron una serie de procesos que llevaron a una "liberación sexual" de la mujer, y la noción de la mujer pura y asexuada se fue diluyendo. Hoy no es raro que las mujeres tengan relaciones casuales, que se coman a alguien en un carrete, etc. Ahora la pregunta que me nace en este contexto, se trata esto realmente de una liberación sexual? Hace un tiempo leía un artículo sobre una investigación realizada sobre el "ponceo" en adolescentes pokemones (sí hay cientistas sociales que investigan sobre los pokemones) y la autora daba cuenta que a pesar de que las mujeres tuvieran la "libertad" de "comerse" a varias personas en una misma noche, en el fondo no se trataría de una liberación femenina ni sexual de las niñas, quienes en el fondo no estarían más conectadas a su derecho al placer y a vivir una sexualidad plena, sino que en el fondo estarían pendientes de responder a los deseos y expectativas de los hombres. Es decir, no buscan el placer recíproco que podría obtenerse en una relación simétrica, sino que complacer de manera bastante unidireccional, siendo esta actitud de "complacer" al otro lo que reafirmaría su "autoestima" y las harían sentirse "más mujer". Manteniéndose la relación asimétrica hombre-mujer.

De qué se trata entonces? Utilizaré dos categorías que ya han ido saliendo en las distintas notas de este blog: cabrona y concubina. Lamentablemente, como yo lo veo es que en realidad no se ha dado un paso hacia la liberación femenina, sino que se ha reafirmado la figura de la mujer como objeto sexual - y hago énfasis en la palabra objeto - y se ha mantenido la mujer como concubina, en el sentido de complacer al hombre (o la pareja) y que todas sus acciones están ligadas a dicho objetivo, constituyéndose una autoestima y una femineidad ligada a la valoración que la pareja haga de ti.

Lo que me parece bastante peculiar, es que a pesar de ser "bastante aceptado", aún se mantiene la idea de que las mujeres que se agarran a varios minos, son "maracas". Para dar un ejemplo, hace poco menos de un año, estaba con mi (ex)pololo y sus amigos carreteando en la u de él, y ellos empezaron a hablar de dos amigas de ellos - ojo, que eran amigas - y a ambas las tildaron de maracas. Recuerdo que yo me enojé con mi pololo de ese entonces, porque no entendía cómo podían tildar a sus propias amigas de maracas. Pero luego, a través de otras anécdotas sobre las chiquillas en cuestión, y poniéndolo en perspectiva, llegué a una conclusión que puede dar luces respecto a esto y a diferenciar entre una mujer empoderada de su sexualidad y una simple concubina.

En el caso que pongo como ejemplo, resultaba que esas chicas eran de las que "se le tiraban" a los hombres (literalmente), eran de las que posaban con sus amigos y desconocidos en poses sexonas, y utilizaban técnicas de seducción bastante burdas y explícitas - piensen en alguna de las minas de la farándula o de yingo - y que se curaban raja quedando poco menos a disposición de lo que cualquier tipo quisiera hacer con ellas (bastante patético, a todo esto). Eso, es a mi parecer, una maraca: una concubina; y no pasa tanto por el hecho de agarrarse pocos o hart@s min@s, sino que cómo se establecen esas relaciones casuales, cuál es la motivación y cuáles son los términos en que se establecen. En este caso, es de una clara asimetría.

Una cabrona, por otro lado, se agarre o no a varias personas, tenga relaciones casuales, etc; tiene una actitud distinta y se relaciona con sus posibles parejas casuales (o serias) en términos de igualdad y reciprocidad. Tú me das y yo te doy (lo que sea que andes buscando si es sólo sexo o amor). Y a diferencia de las "maracas" utiliza técnicas de seducción bastante sutiles, que no caen el "erotismo" burdo de chupar un chupete con care'caliente, como ofreciéndose "aquí estoy lista, ven a darme" - perdonen mi lenguaje, pero ya saben que yo no soy pa'na dama -. Sino que implica una seducción mucho más activa, y ciertamente, al menos desde mi parecer, con mucho más orgullo y autorespeto. Una mujer empoderada sexualmente es en el fondo una mujer que sabe que tiene derecho al placer y que se constituye como sujeto con una dimensión sexual, que se plantea en términos de igualdad con su compañer@, y que es activa en la seducción, conquista y en la misma relación sexual y amorosa. No es ni se presenta a sí misma como una vagina con patas.

Esa es mi humilde opinión




PS: Espero que no les moleste el cambio de look del blog :S

viernes, 11 de junio de 2010

El cine y yo (Segunda Parte): "Simplemente no te quiere".-


Por: Melisa Blanc.-


No soy de películas románticas. Son demasiado irreales y generalmente redundan en cosas estúpidas (ya saben... ella lo llama y él no contesta porque está en el auto camino hacia su casa para decirle que la ama, pero la encuentra muerta porque no contestó el teléfono, jajaja). Sin embargo siempre significan pasar más tiempo con mi mamá, así que tiendo a hacer caso omiso a los corazones y comienzo a jugar con la trama (hasta que me aburro).

Hace un tiempo -harto tiempo -encontré una película que tenía el alentador título de "simplemente no te quiere". Era una de esas producciones que cada cierto tiempo un puñado de actores famosos -y Jennifer Aniston -hacen con el mismo formato en la tapa. Sentada -más bien echada -y predispuesta a encontrarme con la misma comedia de situaciones me encontré con dos cosas interesantes:

1.- El protagonista aparece en Dodgeball.

2.- Una reflexión de lo más interesante:


"Una chica jamás olvidará al primer chico que le gusta. Aunque las cosas no acaben bien. Pero normalmente alguien te ofrece algunas palabras sabias...

- Querida... sabes por qué ese niño te empujó? porque le gustas.

Y helo ahí. El principio de nuestro problema. Sabes que significa todo esto? A todas nos alientan... no, nos programan a creer que si alguien actúa como un idiota... es porque le gustas."

- "Ése es el problema, le gustas demasiado... eres demasiado bonita e increíble... sí, no puede soportarlo." (No les suena familiar?).-

- "Obviamente le gustaste a ese chico... seguro perdió tu teléfono..." (Y ahora?).

- "No te invita a salir, porque le intimida tu éxito profesional..." (jajajaja y ahora??).

- "No te ha invitado a salir, porque le da miedo tu madurez emocional." (ouch!)

- "Créeme, es porque acaba de salir de una relación seria" (Jjaajjaja).

- "Créeme, es porque nunca ha tenido una relación seria".

"Por qué nos decimos cosas así? Será porque quizá tenemos miedo... y es demasiado duro decir la verdad... que tenemos enfrente de las narices??"


La película CLARAMENTE no es para el Oscar (aunque le den el Oscar a Avatar... lo cual te haga pensar que cualquiera puede tener un Oscar), pero es entretenida. Para la gente que le gusta reírse de sí misma y del resto de su género. Y lo mejor... si un día no tienes ganas de pensar.


miércoles, 2 de junio de 2010

El cine y yo (primera parte): Chicas malas.

Por: Melisa Blanc.-

Sé que no me habían echado de menos, pero aquí estoy para llenar sus retinas de temas irrelevantes jijiji.

Esto surge porque me gustan mucho las películas. Ver películas, buscarlas, pasarme películas y comentarlas con mis amigos, y en algún momento hacer de crítica (pero no será hoy). Para esta ocasión les quiero hablar sobre un rol femenino muy particular en la historia del cine: las chicas malas.

Qué chicas malas conocemos? Qué tienen que las hace malas? Le hacen daño al protagonista, quieren destruir el mundo, pero... algo más?Por qué el hombre malo queda en nuestra retina y no la tipa malvada con poca ropa? Repasemos un poco y llegaremos a mi punto. A la más malosa de todas.

[Mi comentario desde aquí está basado en un par de rankings que encontré por ahí en la internerd, pero los usaré de referencia.]


1.- Harleen Queen, Cat Woman, Poison Ivy.... las villanas de Batman. No me convencen (lo siento por los fanáticos, a mi también me gusta batman). Son inconsistentes, meros adornos, no pueden hacer nada solas. Ni siquiera se avivan para juntarse entre ellas en algo que no derive en soft porn. (Ya sé que la payasa aún no sale en película, pero no queda mucho para que salga).


2.- Elle Driver (Kill Bill): Es perversa, violenta, vengativa, sin compasión... pero es una perra celosa, nada más. No tiene la elegancia del villano. Bill la llama y ella no mata a la novia. Y listo, así nomás. No, tampoco es lo que busco. Lo de Elle Driver es... celos profesionales (mal que mal, ellas trabajan matando gente, o no?).


3.- Annie Wilkes (Misery): No, no era tan mala. Era una grupie. jajajaja Así como hay gente que quiere violarse a Miguel Bosé... ella quería tener a su escritor favorito para siempre...


4.- La madrastra de blancanieves (la de la película de Sam Neil): No fue su culpa, la culpa la tenía el espejo, yo vi cuando el espejo le dijo "todo es culpa de la pendeja.... mátala porque por su culpa se murió tu hijo y te extirparon el útero...". Así que ella tampoco es que fuera mala... Estaba súper loca.


5.- Mystique (X-men): Tenía dramas, como todos los mutantes, y en ese mundo todos están medios tocados por ser la minoría discriminada.

6.- Azami Yamazaki (Audition): Esto lo voy a decir muchas veces. No era mala, estaba loca. No es lo que busco, pero se acerca mucho. Ella es mala porque tiene una motivación de género. No le gusta ser el género débil. Se acerca, pero no (Con el cine oriental de momento no me voy a meter, porque ahí sí que no termino nunca).

7.- Y finalmente... la encuentro. La única mala realmente mala, "mala de adentro" como dice la señora en su casa. Y saben donde la encuentro? En una película de 1946, basada en un cuento de Ernest Hemingway. Interpretada por la MARAVILLOSA Ava Gardner, Kitty Collins es la verdadera mala, la que no tiene nada que envidiarle a un hombre, la que trabaja sola, la que no hace el trabajo sucio para que después el chulo la deje botada y ella, arrepentida -y con poca ropa -se una al protagonista y todo termine en un final explosivo (no, no es la mala de Hércules). Kitty Collins se caga al protagonista, lo deja botado y cuando lo vuelve a ver, le pone cara de gato con botas y se lo caga de nuevo, uno la ve aliada con el malo, pero en el fondo sabes que se lo va a cagar. Y de hecho se lo caga también. Hace que los hombres caigan por calientes y se lleva su plata sin pena.





Idola. The Real chuchesumadre.

Vida en pareja

Por: Esbirro de Arlequín

Iba es escribir sobre los amigos con ventaja y su utilidad… pero he estado estos últimos días pensando mucho en otro tema: la soledad. Escribo esta entrada con un espíritu de autoayuda.

Una anécdota previa: tengo una amiga a la cual siempre le he regañado el hecho que no sabe estar sola, que siempre requiere estar emparejada y realizar actividades de parejas (no se… como salir a pasear por el parque comiendo helado, ese tipo de actividades). Me di cuenta (para mi asombro) que mientras yo le regañaba esto yo sufría del fenómeno completamente opuesto, a saber, que no sé estar emparejada.

La verdad es que no he tenido muchos compañeros en mi vida. Con mi tímida personalidad y mi desconfianza en las personas (por traumas infantiles) antes me costaba mucho acercarme a las personas, problema actualmente solucionado. Sin embargo, mantengo cierto residuo en cuanto a los compañeros. Es una constante desconfianza y conocimiento que nada es eterno, que todo se acaba y que las personas se alejan. Pienso que si me acerco mucho a una persona, me encariño o enamoro de ella... al final me abandonará y sufriré por ello. Entonces, aplico la medicina antes de la herida.

Además, creo que me he acostumbrado a estar sola. A disfrutar (sola) de los pequeños placeres que nos otorga la vida día a día. Me siento invadida si una pareja trata de disfrutar conmigo de aquellos placeres (sé que es parte del hecho de ser pareja pero es una cuestión irracional que me afecta).

¿Moraleja? Para ser una persona integra, creo, uno de saber como convivir en pareja y vivir en soledad para poder disfrutar de la vida en las circunstancias en que la vives. ¿Yo? Bueno trato de condicionarme a esta idea.